Barcelona arrolló 4-0 a Real Madrid en el Santiago Bernabéu, donde los catalanes dieron una lección de que la calidad de los jugadores y la disciplina táctica, impuesta por el alemán Hansi Flick, sin importar su juventud se impusieron al glamur y experiencia de las estrellas madrileñas.
En el primer tiempo, la posición del balón y la iniciativa de buscar el arco contrario fue para el Barcelona a partir del minuto 20, mientras que en los primeros minutos fue Real Madrid, quien llevó peligro al arco blaugrana con algunas ocasiones de Mbappe y Vinicius Jr a la ofensiva, pero sin lograr resultados: hoy su delantera falló de cara a la portería.
En el segundo tiempo, Barcelona se creció en ataque y defensa.El delantero Robert Lewandowski y sus compañeros blaugranas se empacharon de subidas al arco contrario, y al final su persistencia tuvo premio: el alemán anotó dos goles seguidos en los minutos 54 y 56.
Lewandowski rompió un partido que comenzó soso en el segundo tiempo con sus goles,llenó de silencio a los graderíos del Santiago Bernabéu. Y este marcador a favor del Barcelona dio alas al grupo de jóvenes blaugranas para que se divirtieron en el campo, y anularan con contundencia cualquier iniciativa del Real Madrid por contrarrestar el marcador, en un día donde no se vio un trabajo colectivo de los madrileños.
Real Madrid también mostró hoy una defensa floja en la zonas lateral y central, con errores y desconcentraciones de Ferland Mendy, Éder Militao y Antonio Rüdiger al que se sumó un medio campo que no ejerció presión, situaciones que le dieron espacio libre a las arremetidas del Barcelona.
Durante el primer tiempo, en las jugadas ofensivas el Real Madrid no mostró organización apeló a lo que pudiera hacer Vinicius Jr y Kylian Mbappe en la delantera, desde el arranque del partido fue la apuesta blanca, pero no contaban con que la estrategia de fuera de juego bien implementada por la defensa del Barcelona, que dejó inhabilitado a Vinicius Jr y Mbappe en repetidas ocasiones.
Al delantero francés se le anuló un gol por posición adelantada en el minuto 30, una situación que se repitió hasta siete veces. Fue un día donde el delantero galo lo intentó pero también no estuvo certero: falló en varias ocasiones.
Una dinámica ofensiva con la cual el Real Madrid siguió en el segundo tiempo, con la diferencia que salió Tchouameni y entró Lucas Modric, un cambio acertado por Carlos Ancelotti que provocó una mejor distribución de balones a la ofensiva, el croata comenzó ha organizar desde el medio campo el juego madrileño pero sin lograr resultados.
El tiempo siguió su curso, y el tercer gol de los catalanes fue anotado el minuto 77 por Yamine Lamal gracias un pase de Raphinha, el brasileño anotó el cuarto gol en el minuto 84. Un marcador que mostró las falencias del Real Madrid y las fortalezas de un Barcelona dispuesto a luchar a por todas y contra cualquiera.